“Cartel del confort” y el inadecuando comportamiento de una empresa certificadas por FSC

Reportaje publicado en Revista Bosque Nativo volumen 56.

A fines de octubre de 2015, la opinión pública nacional y en particular el sector forestal, fueron impactados cuando la Fiscalía Nacional Económica (FNE) presentó ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) un requerimiento contra CMPC Tissue y SCA Chile (ex PISA) por haber “creado y participado de un cartel para asignarse cuotas de mercado y fijar precios de venta de productos de la categoría de papeles tissue”.

Según informaron los medios de comunicación, “ambas firmas celebraron y ejecutaron acuerdos que les permitieron mantener operativo este cartel a partir del año 2000 y al menos hasta diciembre de 2011, afectando el mercado nacional de comercialización mayorista de papel higiénico, toallas de papel, servilletas, pañuelos desechables y faciales en el canal de venta masivo”. En los días siguientes, a través de El Mercurio, FSC Chile, la representación local de Forest Stewardship Council (FSC) y organismo internacional que entrega un sello de manejo sustentable, se vio obligada a solicitar la evaluación de sanciones a la empresa que es miembro de la instancia, a objeto de “proteger la integridad de FSC ante los riesgos que ocasionen organizaciones asociadas al involucrarse en actividades inaceptables”.

FSC (Forest Stewardship Council o Consejo de Manejo Forestal) es una organización internacional independiente que fomenta el desarrollo de prácticas para la gestión de los bosques mundiales que sean compatibles con el medio ambiente, beneficiosas para la sociedad y económicamente viables, de la cual la AIFBN es miembro a través de la Cámara Social de su filial chilena. Es por ello, que al saberse públicamente del denominado “Confort Gate” o “El Cartel del Papel”, la AIFBN mostró su inquietud ante la “pérdida de prestigio y credibilidad del sello” causada por CMPC y SCA pidiendo una reacción rápida de FSC para congelar la membresía y certificados de ambas empresas en Chile y otros países latinoamericanos hasta una completa investigación de la violación de los principios de FSC”.

Para sorpresa y preocupación, en particular de la AIFBN, la votación realizada en la Asamblea General extraordinaria de socios FSC-Chile llevada a cabo a fines de mayo, no ratificó la expulsión del socio Empresas CMPC S.A. de la membresía de ICEFI (Iniciativa Chilena de Certificación forestal independiente). El objetivo de esta jornada, tenía por objetivo ratificar la medida adoptada por el directorio de FSC-Chile, sobre la expulsión de la empresa.

De acuerdo con Alfredo Unda, miembro individual de FSC, “esto no es una sorpresa porque en la Asamblea hay mayoría de representantes de las empresas, y prácticamente no hay representantes de las partes interesadas (varios millones de personas que viven en y en torno a las plantaciones certificadas) y sólo uno o dos representantes de los trabajadores forestales (de un total de más de 100 mil). Esto no es falla de la herramienta FSC si no de los chilenos que no la hemos sabido utilizar y ni hemos sido capaces de participar como corresponde. Si en la Asamblea hubieran estado quienes deben estar debidamente representados no estaríamos escribiendo este artículo, porque la Asamblea habría expulsado a CMPC”.

El director honorario AIFBN y quien también fue socio de FSC-Chile, Luis Astorga, profundiza: “Varios miembros de FSC-Chile denunciamos a nivel nacional e internacional ante nuestros órganos esta situación que viola nuestra confianza, no en CMPC sino que en el Sistema FSC y nuestros estatutos. Propusimos suspensión o expulsión, lo que en el caso de ICEFI/FSC-Chile fue investigado y luego de escuchar a las partes y en base a un detallado y excelente análisis jurídico, que demuestra a cabalidad la infracción a los estatutos, el Directorio decidió por la unanimidad la expulsión de CMPC”.

“De acuerdo a los estatutos de ICEFI, la decisión del Directorio de expulsar a CMPC debería ser ratificada en una Asamblea Extraordinaria dada la gravedad de la medida. Esta Asamblea, que se llevó a efecto el 20 de Mayo pasado, no ratificó la decisión del Directorio de expulsar a CMPC, lo que constituye un nuevo paso en el proceso de pérdida de credibilidad que está sufriendo el FSC en Chile y, por ende, a nivel internacional ya que la colusión de CMPC no solo fue en Chile, sino también en Colombia y en otros países latinoamericanos en donde hay procesos de investigación”, agrega.

Sin embargo, para Alfredo Unda, la votación por la expulsión no corresponde, ya que la propia empresa se ha auto-denunciado, “es decir ha informado sobre un perjuicio de proporciones nacionales llevado a cabo durante 10 años, está acusada por la Fiscalía Nacional Económica de uno de los mayores casos de colusión detectados en Chile y aún no se sabe cómo va a resolver el daño causado, o sea no ha hecho nada ni se ha informado de cómo van a realizar reparaciones. Por lo tanto, mientras su proceso legal no se complete, es la empresa la que debe auto marginarse de pertenecer a FSC-Chile, por no cumplir con los principios éticos implícitos en los estándares FSC como lo ha reconocido al auto-denunciarse, ni tampoco con los principios éticos desplegados en su misión descrita en su página web y documentos. En consecuencia, sólo cabe que ella misma se margine si desea recuperar su credibilidad y poder volver a ser parte de FSC, es lo mínimo que se puede esperar de una empresa seria y respetuosa de los valores sociales y ambientales que dice defender. Lo contrario es insostenible, ya que al alterar el funcionamiento correcto de FSC, utilizando su poder e influencia, sólo ha logrado un mayor desprestigio como empresa. Es una actitud miope”.

Comportamiento inadecuado

La representante de la AIFBN en FSC-Chile, María José Ruiz-Esquide, coincide con Astorga. “Nos sorprende y preocupa de sobremanera ya que para muchos miembros del FSC y quienes defendemos la integridad del sello, la actitud adoptada por empresas CMPC no se condice con el comportamiento responsable de una empresa certificada”, asegura. A su juicio, la instauración del sello FSC en Chile es un proceso que ha tardado años de trabajo, posicionamiento y validación, para demostrar que quienes se encuentren certificadas efectivamente desarrollan un modelo productivo económico, social y ambiental responsable “no sólo con las personas involucradas directamente en el proceso, si no con toda la sociedad, el cual incluye una conducta éticamente irreprochable”.

“FSC en Chile, como plataforma de convergencia y diálogo, entre las empresas de desarrollo forestal y la comunidad, ha logrado lo que no ha sido posible en otras instancias, ni siquiera en una legislación que lo respalde hoy en Chile: FSC ha sido una plataforma de cambios entre los tres sectores. Como miembros del FSC Chile, esperaríamos al menos que habiendo reconocido los graves hechos de colusión, dichas empresas se mantuvieran al margen de pertenecer al sello”, puntualiza.

Ruiz-Esquide insiste: “Para la AIFBN es totalmente incomprensible la no ratificación en la asamblea de la expulsión de CMPC, menos en el contexto donde el director de FSC IC reconoce públicamente que el sello condena este tipo de prácticas”.

“Lo sucedido con CMPC va en contra no sólo de los principios fundamentales del sello si no de la apuesta al plan estratégico para el 2020 donde se propone la búsqueda de soluciones conducentes a logros en beneficio de los bosques y la gente bajo un marco de justicia, equidad y confianza mutua, promoviendo la protección y el ejercicio pleno de los derechos de las personas, implementando métodos confiables y transparentes de validación de prácticas responsables. Bajo este paradigma, nos resultaba esperable, como mínimo, que tanto la empresa como los demás socios cooperaran en defender estos principios y decidieran, al menos voluntariamente, mantenerse al margen de su participación”, detalla Ruiz-Esquide.

Si bien con la votación se decidió no apoyar la decisión del directorio FSC-Chile, el proceso no se cierra, ya que queda abierta la posibilidad de continuar con otro tipo de sanción definida en los estatutos de este sello de certificación internacional. Mientras este hito se desarrolla, a nivel local el Trigésimo Cuarto Juzgado del Crimen rechazó admitir a tramitación la querella interpuesta contra CMPC y SCA Chile por su “presunta colusión”, ya que -según la resolución- los hechos denunciados por la querellante no son constitutivos de delitos, al no existir en Chile una sanción específica para conductas colusorias.

Principios violados

Uno de los 10 principios de FSC es que las organizaciones deben cumplir con todas las leyes, reglamentos y tratados internacionales ratificados en el ámbito nacional, así como las convenciones y los acuerdos. Otra de las normas se refiere a que se deben mantener o mejorar los beneficios económicos, sociales y ambientales a largo plazo provenientes del bosque. Esos son algunos de los puntos que busca resguardar el organismo. Para el Forest Stewardship Council esta es una situación muy delicada porque el sello FSC, que poseen estas empresas tanto en Manejo Forestal, como en Cadena de Custodia, les garantiza oportunidades de mercados en los que ellas traicionan la confianza de consumidores y se coluden para aumentar ilegalmente sus utilidades. Además hay un engaño al Sistema FSC que siempre ha luchado por una conducta ética en las empresas certificadas, que va más allá del solo cumplimiento de estándares.

En este sentido, en noviembre de 2015, en El Mercurio, el presidente de FSC Chile, Hernán Verscheure, explicó que las sanciones que podrían aplicar contra CMPC son amonestación, suspensión de la membresía o expulsión de los registros institucionales. Perder la certificación para una compañía exportadora, en este caso de productos forestales, es “grave”, aseguran expertos en la materia, ya que los envíos podrían ser rechazados por los compradores internacionales al ver que su proveedor ya no les da la posibilidad de tener un sello ambiental en sus productos finales. Verscheure sostuvo que la certificación “para gran parte de los mercados es la llave de acceso” a los mismos. Pero en septiembre de 2013, el presidente de la compañía, Eliodoro Matte, en el lanzamiento del Reporte de Desarrollo Sostenible, señaló que “un hecho importantísimo ha sido la certificación, a comienzos del año 2013, de nuestros bosques de Chile y Brasil por el FSC. Con esta certificación culmina un prolongado esfuerzo que estuvo centrado en desarrollar acciones que armonicen los ámbitos económico, social y ambiental relativos a nuestro quehacer forestal”.

En el mismo tenor, Luis Astorga, manifestaba a través de una carta a la entidad certificadora su preocupación al saberse que ambas empresas se habían coludido durante 10 años para fijar los precios de los productos Tissue, es decir, más elevados que aquellos de la libre competencia, recordando, además, que ambas empresas dominan el 85% del mercado chileno y los mercados de otros países latinoamericanos. “Ante la opinión pública chilena esta es una situación muy grave porque se ha incumplido la ley y se ha obligado al 95% de chilenos y chilenas a pagar más durante 10 años por un artículo de primera necesidad para llenar los bolsillos – más aún – de dos grandes grupos económicos, uno de Chile y otro de Suecia. Ambos con numerosos certificados de FSC, lo que está claramente violando la confianza y credibilidad”, aseguraba Astorga.

El socio AIFBN, manifestó más tarde a través de una columna de opinión que “hemos estado comprando por muchos años productos forestales a precios coludidos, hecho muy grave que erosiona la credibilidad de la mayoría de chilenos y chilenas y otras nacionalidades que habitan Chile. Esto nos hace reflexionar seriamente sobre el modelo neoliberal de mercado que nos rige porque el “Confort Gate” no es un hito aislado. Ya tuvimos la colusión de las farmacias, de los pollos y otros. Es un deja vu de la conducta de las grandes empresas chilenas. No sólo es el hecho de la tremenda concentración que ocurre en todos los sectores económicos, si no también la colusión para lograr una posición aún más monopólica en el mercado”. Alfredo Unda recuerda que especialistas y académicos norteamericanos, como Ross Schneider(1) han bautizado el capitalismo chileno como “capitalismo jerárquico” y dice que Chile es el caso clásico, donde estas grandes empresas están controladas por unas pocas familias, el académico del MIT estima que este “capitalismo familiar”, como también llama al modelo chileno, “difícilmente puede ser defendido por los partidarios del libre mercado”. Refiriéndose a la colusión de precios que se ha detectado en Chile, Schneider afirmó a CIPER: “Dado que el capitalismo jerárquico tiende a concentrar mucho poder en pocas corporaciones, puede producir carteles. Lo que hoy estamos viendo no me sorprende en realidad”.

“Es imprescindible que tanto la cámaras ambiental como la social de FSC-Chile aumenten sus socios porque actualmente son muy pocos, y no corresponden al universo de más de 100 mil trabajadores forestales y de varios millones de personas que viven en el entorno de las plantaciones certificadas, lo cual otorgaría un mayor equilibrio entre las tres cámaras. Si este equilibrio fuera como corresponde, CMPC habría sido expulsado”, asegura Alfredo Unda.

Agrega, que también es importante que se establezca un comité de ética porque no es presentable que una empresa de la envergadura de CMPC habiendo cometido un delito gravísimo no tenga la honestidad, la valentía y la inteligencia de retirarse como corresponde a una empresa certificada FSC, cumplidora de los estándares de manejo forestal sustentable, persista en mantenerse deteriorando el sistema FSC y sume más desprestigio al ya alcanzado con la colusión a escala nacional durante 10 años.

(1) ROSS SCHNEIDER. “El capitalismo jerárquico de Chile difícilmente puede ser defendido por los partidarios del libre mercado” Por : Juan Andrés Guzmán en Actualidad y Entrevistas. CIPER. Publicado: 04.05.2016 http://ciperchile.cl/2016/05/04/el-capitalismo-jerarquico-de-chile-dificilmente-puede-ser-defendido-por-los-partidarios-del-libre-mercado/

Escrito por Pedro M. Andrade – Revista Bosque Nativo vol. 55 2016